El presidente Alberto Fernández anunció una serie de medidas, que entrarán en vigencia este viernes, como reducir la circulación de personas entre las 0 y las 6, cerrar bares y restaurantes a partir de las 23 y suspender las actividades sociales en domicilios particulares, con el objetivo de frenar el incremento de contagios de coronavirus que hoy llegaron a los 22.039 casos.
“Hoy contamos con un sistema de salud fortalecido y estamos en plena campaña de vacunación. Necesitamos el compromiso de todos y todas para reducir la velocidad del contagio mientras avanzamos con la vacunación”, señaló el Jefe de Estado desde la residencia de Olivos, donde cumple desde el viernes último aislamiento obligatorio bajo control médico tras dar positivo de COVID-19, con evolución favorable.
Las nuevas medidas, que regirán hasta el 30 de abril, estarán comprendidas en un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) dispuesto por el Poder Ejecutivo, regirán para todo el país y habrá otras más específicas para zonas con mediano y alto riesgo epidemiológico y sanitario.
Además se suspenden: las reuniones sociales en espacios públicos al aire libre de más de 20 personas; las actividades de casinos, bingos, discotecas y cualquier salón de fiestas; la práctica recreativa de cualquier deporte en lugares cerrados donde participen más de 10 personas; los viajes grupales de egresados y Egresadas, de estudio y de grupos turísticos.
Del mismo modo, en el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires) el transporte público de pasajeros solo podrá ser utilizado por trabajadores considerados esenciales, la comunidad educativa y aquellos que ya fueron expresamente autorizados.
Y en las jurisdicciones consideradas de mediano riesgo epidemiológico y sanitario serán los gobernadores y las gobernadoras quienes deberán adoptar medidas que disminuyan la circulación para prevenir los contagios.
“No me gusta que se haga política con la pandemia, es una amenaza feroz que la humanidad en su integridad afronta”, expresó Fernández, y aseguró que “la pandemia está volviendo con más rigor, en las últimas semanas ha aumentado de manera sostenida el número de casos en muchas zonas del país”.
Según detalló, en la última semana los casos de COVID-19 aumentaron un 36 por ciento en todo el país y un 53 por ciento en el AMBA.
El Presidente sostuvo que “lo que suceda en la segunda ola va a depender de las medidas que implementemos, de que haya un control riguroso en cada jurisdicción, y fundamentalmente del compromiso de cada miembro de nuestra comunidad”.
“En estos meses queremos cuidar la salud, cuidar la recuperación económica y cuidar todo lo que sea posible la presencialidad en las escuelas”, aseguró, y destacó que “las próximas tres semanas son muy importantes: ya hemos vacunado con al menos una dosis a más del 90 por ciento del personal de salud, queremos terminar el mes de abril con la mayor cantidad posible de personas de más de 70 años vacunadas”.
“Estamos en una pandemia, el mundo global está afectado por ella, semejante catástrofe universal no puede volverse una miserable disputa política”, señaló, y afirmó: “Nada me importa más que la salud de nuestra gente”.
El mandatario además volvió a llamar a la reflexión y convocó a “enfrentar este momento unidos más allá de cualquier diferencia política o ideológica”. “Les pido poner la máxima atención en los deberes de cuidado sanitarios que los protocolos imponen, reforzando esos cuidados podremos avanzar mejor en el proceso vacunatorio que está en marcha”, indicó.
Además el Presidente, que había recibido la vacuna Sputnik V, agradeció “muy especialmente a los médicos, al personal de la salud y muy fundamentalmente al Instituto Gamaleya, que se ocupó particularmente de atender la evolución de mi enfermedad”.
Por último, pidió: “Les ruego que me acompañen en este nuevo esfuerzo. Unidos y unidas, vamos a redoblar los cuidados y la vacunación en los próximos meses”.